Saturday 2 February 2008

Quisiera

Lo cierto es que últimamente he estado pensando bastante en la religión. Por todas partes parece que estás obligado a decidir hacia dónde caminas. Y parece mentira que me de más la sensación en este país. España, un país que a pesar de su constitucional laicidad es el segundo más católico de esta Europa que parece que ya dejó de ser Vieja para ser una Nueva. Reino Unido, un país que todavía tiene un enlace visible entre la Iglesia y el Estado. Sin embargo, aquí hay una libertad de fe mucho mayor. Cada uno elige en qué quiere creer y si lo demuestra públicamente o no - no hay más que ir a según qué zonas de la ciudad dónde pareces estar en Islamabad o en "Varsovia antes de la guerra" (note the inverted commas - no es una frase mía). Y quizás es precisamente por eso por lo que me planteo mucho más mis creencias en esta ciudad. Quizás es por ver a los Hare Krishna, a los judíos ortodoxos, a los seguidores del Islam en cualquiera de sus modalidades, a los hindúes, a los anglicanos y, como no, a los católicos. No me olvido a los mormones y a los testigos de Jehová, pero a estos se les tiene que tratar de diferente modo.
El único libro que he ido transportando conmigo de un sitio a otro, el único que siempre viaja conmigo cuando me traslado, el que no olvido, es la Biblia. Entendedme, no soy católico, ni siquiera estoy bautizado. Pero no me voy a llevar el Código Penal.
Por las últimas líneas ya podéis llamarme hereje.

El caso es que últimamente todo a mi alrededor respira religión. En los últimos meses tengo más contacto que nunca con el Islam. Leo libros en los que es el tema principal. Trabajos con gente que sigue sus enseñanzas, en diferentes versiones y de diferentes países. Mis vecinos y los regentes de tiendas de mi barrio son de Oriente Medio. La palabra ḥaram, si no lo era ya, a pasado, recientemente, a mi vocabulario. Y es que no la uso sólo cuando hablo con árabes o sobre su religión, sino hablando también con "Cristianos" (en opsición a "Moros") sobre temas totalmente arbitrarios. Como hoy, que fui a una charity (tienda de segunda mano que destina sus ganancias -ehem- a obras de caridad) y la dependienta preguntó "How much is it?" y yo respondí el barato precio mientras lo buscaba en la primera página para mostrárselo. "I trust you", "But I could be lying", "But you wouldn't do that, would you?", "No, cos lying is ḥaram". Y Baba dice que el único pecado es robar y decir una mentira es robarle a alguien el derecho a la verdad.

Hablo de religión, y lo hago a menudo. He leído bastante la Biblia y la consulto constantemente. No sé demasiado y me gustaría saber más. También me gustaría saber más sobre el Corán y el Torá.
Y, sin embargo, sigo pensando que no creo en lo que todos denominan Dios (o Alá, o Jeová, o Viṣṇú o como quiras llamarle). Y es que la verdad, aún no he decidido si creo en algo o no. Pienso en el espacio, pienso en la existencia, pienso en las razones por las que estamos aquí y todo me da miedo. Pero no me considero agnóstico, por las dificultades lingüísticas que ello acarrea. Y no me considero ateo, porque no niego nada, sólo no lo sé.

En el trabajo, a veces como con una compañera. Por unos instantes se silencia, cierra los ojos y reza. Unos instantes. Gracias. Me da envidia. Me da envidia que ella lo tenga claro. Me da envidia poder encontrar las respuestas a casi todas mis dudas en un libro. Me da envidia saber que todo está decidido. Pero no es de la envidia mala, sino de la sana. Me alegro por ellos, y les respecto totalmente. Pero me es inevitable sentirme, de algún modo, inferior por no compartir esa bendición.

Y hoy, tras leer el artículo del suplemento semanal del Guardian, sobre el libro de AJ Jacobs con sus experimentos con la Bíblia, y tras leer el último párrafo, me doy cuenta de la necesidad que tengo de resolver algunos enredos que tengo por dentro.
Energía. Existencia. Dios. Jesús. Vida. ¿Por qué? Ayer. Mañana.
Pero sigo sin saber qué pensar. No sé si algún día lo sabré.

Como acostumbro, quería poner una imagen de Flickr, pero por alguna razón no puedo entrar.
También podéis ver una foto mía del Brompton Oratory que han publicado en la guía Schmap de Londres. Tenéis que buscarla entre algunas de su grupo, está firmada.

Escuchando: Satkirin Kaur Khalsa : Universal Prayer - Songs of the Soul

9 comments:

Vulcano Lover said...

menos mal que tus posts eran de "coña".
yo a esto no sé que decir. También respeto a quien tiene muy claro el hecho de creer. Yo no... pero no me entristece. es que simplemente no soy capaz de creer en axiomas que para mí no son evidentes. en definitiva, no soy capaz de sentir la evidencia en lo que no lo es. y por lo demás, me siento absolutamente desvinculado de tener que hacer de la tradición y la cultura y la historia que cada religión ha atesorado a lo largo de siglos, algo TAN importante como lo es para muchos de esos creyentes.
Eso. y un beso.

Hugo said...

Pues yo sólo te diré que llegué a un punto en que no sabía donde estaba respecto a la religión. Y que justo ahí, decidí creer en todo. En todo. En drácula, en Dios, en los snorkles, en la virgen María, en la luna, en Buda, en Alaska...

Pero creo que eso es lo mismo que no creer en nada.

Todavía sigue en pie lo de fundar mi propia religión... sólo que espero que no acabe en suicidio, porque sino sería una secta no?

Cvalda said...

Yo también siento envidia de la sana por quien cree tan firmemente en algo, pero, en otros momentos me doy cuenta de que no se pude creer de ese modo si te has parado ha plantearte el porqué de las cosas. Cada paso, cada mirada, cada acto, TODO son preguntas, el mundo es complejo y NADA es tan fácil como simplemente creer. Cuando das un paso más allá, consciente o inconscientemente, es imposible volver atrás.

Y, cuando tú llegues a alguna conclusión (lo que será difícil por la cantidad de implanteables), será mucho más sostenible y duradera que la de los demás.

En mi vida también es una duda constante, que vaga sobre mi, solo que prefiero no pararme a mirarla, por lo que pueda pasarla :S Eso sí, ten por seguro que no hay una sola verdad.

coque said...

yo (de momento) no sé en lo que creo, pero sí sé que siento. siento una necesidad de satisfacer mi parte religiosa.
para satisfacer mi parte artística sé qué hacer y a dónde ir. para la religiosa aún estoy buscando.
me gusta, me interesa ese mundo. una pequeña parte de mí también envidia a la gente con convicciones definidas. otra no, porque me da la impresión de que al quedarse con una "explicación" han renunciado a otros puntos de vista.

pd: por ahora escojo esta baba.

David said...

Hablas de la religión con mayúsculas, la de verdad. Desgraciadamente, está tan manipulada por todas partes que a base de confundir religión con alguna institución en concreto, muchos la terminamos por coger manía.

Superflicka said...

Estoy con Cvalda en que la fe, si no se tiene, es difícil de adquirir. Yo también flirteo con los ortodoxos cuando estoy en Rusia pero temo que me quedo sólo en la superficie. Cuando entramos en temas de moral, no comulgo con ninguna religión: son todas homófobas, patriarcales y represoras.

(Todas no... Pero tú me entiendes)

Habibi said...

todos en general: no se ha de confundir religión con fe, porque son cosas diferentes. Además, si no fuera sacrilégio, de la Bíblia arrancaba la mitad de las páginas. No se debe generalizar.

Al fin y al cabo, este tema debería ser totalmente personal y a nadie le debería importar.

P_a_t_r_y_ said...

vienen tiempos duros...

viene una ola de radicalismos en todo tipo de religiones

el resto que no encaja será perseguido...

ains

Habibi said...

patry: joé ... .. .. . ... .. .